La razón de ser de LZF Lamps siempre ha sido el producto. La realización de productos en madera natural ya es en sí misma una declaración de principios. Como se ha visto, la madera es un producto que por sus cualidades, es capaz de trascender el objeto que configura.
El sello de identidad de LZF Lamps son en efecto sus lámparas como objeto, pero también el ambiente que crean gracias a la textura, la calidad y el color de los que se dota al material básico, así como su forma de utilizarlo, haciendo de cada lámpara una pieza única, hecha a mano, pero con lenguaje industrial o, utilizando el término acuñado por el diseñador Marcelo Leslabay, un producto post-artesanal: series cortas de objetos contemporáneos, no de artesanía ni tradicionales, pero fabricados con medios artesanales.